Todas las personas, se crean metas y sueños que cumplir, sueños de una profesión, tener familia, ayudar a quien sea necesario, etc. ¿Pero que pasa cuando nuestros sueños son interrumpidos?
Muchos de las personas se caracterizan por no poder cumplir muchas de las metas que algún día a lo mejor se propusieron, esos sueños de poder estudiar y que no pudieron por que tenían que trabajar, el de quizás tener muchos amigos y que no se podía por que te rechazaban, o tal ves ese sueño de formar una familia, pero no podían tener hijos, entre otros. ¿Pero que pasa con esos sueños que tú interrumpiste?
Muchos de los jóvenes hoy en día ven los sueños de una forma mas superficial, cuando desean ser profesionales en la vida lo toman como una obligación, pero no se dan cuenta de los pasos importantes que hay que seguir para ello, es decir, simplemente lo toman como algo que tiene que llegar y no como algo al cual nosotros tenemos que llegar, es por eso que hablo de sueños interrumpidos, en la actualidad la juventud habla de sueños hacia el futuro pero muchos de ellos como la misma palabra lo dice solo quedan en sueños… y no en metas de las cuales debieran cumplirse.
En la actualidad no se mira con conciencia lo que realmente queremos de nuestras vidas, deseamos y nos proponemos sueños y metas a cumplir, pero muchos de ellos son interrumpidos por nosotros mismos, cuando tenemos el deseo de cumplir algo lo hacemos, pero si lo tomamos como algo sin importancia lo vamos a dejar pasar y se transforma en un sueño del cual nunca se cumplió, y tenemos que cargar con el hasta proponernos otra meta, por ejemplo cuantas adolescentes desean ser profesionales, en cierta parte no le toman mucha importancia pero sigue siendo un sueño que cumplir, ¿pero que pasa cuando ese sueño se interrumpe con la llegada de un hijo a la tierra? Tienen que trabajar para poder mantener al hijo y ¿la universidad? ¿Los sueños de ser profesional? Quizás para muchas siga siendo lo mismo, pero así todo el sueño o meta propuesta por esa adolescente fue interrumpido por ella misma, por no tomar conciencia de los actos y no tener claro que quieren de verdad para sus vidas.
En la actualidad no se mira con conciencia lo que realmente queremos de nuestras vidas, deseamos y nos proponemos sueños y metas a cumplir, pero muchos de ellos son interrumpidos por nosotros mismos, cuando tenemos el deseo de cumplir algo lo hacemos, pero si lo tomamos como algo sin importancia lo vamos a dejar pasar y se transforma en un sueño del cual nunca se cumplió, y tenemos que cargar con el hasta proponernos otra meta, por ejemplo cuantas adolescentes desean ser profesionales, en cierta parte no le toman mucha importancia pero sigue siendo un sueño que cumplir, ¿pero que pasa cuando ese sueño se interrumpe con la llegada de un hijo a la tierra? Tienen que trabajar para poder mantener al hijo y ¿la universidad? ¿Los sueños de ser profesional? Quizás para muchas siga siendo lo mismo, pero así todo el sueño o meta propuesta por esa adolescente fue interrumpido por ella misma, por no tomar conciencia de los actos y no tener claro que quieren de verdad para sus vidas.
Así también pasa con el resto de la vida, si las personas se toman así las responsabilidades de un futuro próximo, de por si nunca lucharían por superarse, si los jóvenes no se dan las ganas y fuerzas necesarias para poder cumplir sus sueños, nunca saldrían a delante y si lo hacen seria de una forma conformista, o si no a costas de otro.
Las personas que destacan en la vida son las personas que creen en sí mismo sin importar las circunstancias. Son las personas que deciden levantarse a pesar de las dificultades y obstáculos. Necesitamos sentir aprecio por nosotros mismos, independientemente de lo que suceda, necesitamos apreciar nuestras cualidades y aceptar nuestras debilidades. Debemos reconocer que podemos fallar, pero que no nos hundimos cuando perdemos, por el contrario los fracasos si lo permitimos nos ayudan a crecer y nos permiten enfocarnos en lo que queremos mejorar. La mejor manera de lidiar con los planes inconclusos es reorganizar nuestras metas, explorar los pensamientos que tenemos hacia nosotros mismos e iniciar a visualizarlos como oportunidades para crecer y madurar.
"No debemos pensar que nuestro tiempo ya pasó, mientras estemos vivos siempre habrá algo para aprender y mucho por hacer.”
.
.
.
.
.
..
.
Publicado por: Milenka Domich